Las horas previas a una intervención quirúrgicas son increíblemente largas, debido a que la ansiedad provoca ganas de comer, nos quita el sueño y nos mantiene intranquilos durante varias horas.
Lo que no hay que olvidarse es que si es una decisión tomada para mejorar nuestro autoestima o estilo de vida la cirugía traerá consigo grandes beneficios. Así que
mantener la mente positiva es uno de los pilares para que estar tranquilo.
En cuanto a la ansiedad literalmente debemos ponerle candado a la heladera y a la alacena; el mayor desafió es
como vencer el hambre sin incurrir en atracones nocturnos. El día anterior debes comer concienzudamente porque debes realizar una ayuna de al menos ocho horas para que la cirugía se realice sin ninguna complicación, eso no te habilita a que antes de esas ocho horas llenes tu estomago.
Para pasar la noche si no puedes dormir elige una película de comedia para que te mantenga distraído así pasara la noche sin pensar en la cirugía.